ITALIA – El muestreo periódico realizado por la Oficina de Estudios de Acimall está mostrando que en el segundo trimestre de 2016 los pedidos aumentaron un 21,2 por ciento en comparación con el mismo período del año pasado.

La tendencia positiva de los últimos tiempos continúa, impulsada por los mercados de exportación, donde las órdenes de compra subieron un 17,2 por ciento.

El desarrollo de la demanda italiana también ha sido muy positiva en términos relativos (+30.4 por ciento), aunque todavía sufre de los efectos negativos registrados en los peores años de la crisis. “Una vez más vemos una notable diferencia entre Italia y exportaciones”, comentó Darío Corbetta, director de Acimall. “El mercado italiano está creciendo a tasas satisfactorias, pero aún estamos lejos de los niveles previos a la crisis. En el extranjero, en cambio, ya estamos en los volúmenes anteriores a 2008 y todo apunta a que esta tendencia perdurará”. El optimismo es bienvenido, aunque las cifras proporcionadas por el observatorio de Acimall deben interpretarse correctamente. “En cuanto a las opiniones de nuestra muestra de empresas, es necesario aclarar algunos aspectos”, Corbetta añade. “La excelente evolución de la tecnología italiana es más relevante para los grandes grupos y las organizaciones más grandes, por lo tanto nuestras empresas tienen que encontrar una manera de trabajar juntas, para integrarse, porque sólo con dimensiones mayores podrán acercarse efectivamente a nuevos mercados que ofrecen oportunidades reales en este entorno económico”.