SUECIA – El director financiero de Ikea para Turquía, Kerim Nisel, ha informado a Reuters que el proveedor sueco de muebles va a trasladar una mayor parte de su producción a Turquía en respuesta al aumento de los costes de transporte y a los problemas con las cadenas de suministro globales.

Los productos que espera fabricar y luego exportar desde Turquía, incluyendo sillones, bibliotecas, armarios y gabinetes de cocina, se envían actualmente a miles de kilómetros desde el este de Asia a los mercados de Oriente Medio o Europa.

“Debido a los problemas de transporte a los que nos enfrentamos durante la pandemia, estamos intentando tener más producción en Turquía”, dijo Kerim Nisel a la agencia de noticias. “Todos vimos en la pandemia que la diversificación es muy importante. No sería una buena estrategia producir artículos en un país y luego intentar transportarlos por todo el mundo”.

Nisel dijo que el coste de un contenedor desde el este de Asia había subido de 2.000 a 12.000 dólares, incluso antes de que Covid-19 se extendiera por todo el mundo a principios de 2020. “Es más racional que [los productos] se fabriquen más cerca de donde se venden. Por eso queremos que se fabriquen en Turquía”.

La movida de Ikea sigue pasos similares de otras marcas europeas como Benetton, que está acercando la producción a su país impulsando la fabricación en Serbia, Croacia, Turquía, Túnez y Egipto con el objetivo de reducir a la mitad la producción en Asia.