ALEMANIA - La industria alemana del mueble se enfrenta a importantes retos de demanda, informó Jan Kurth, Director General de la Asociación Alemana de la Industria del Mueble.
Los pedidos a los fabricantes son notablemente inferiores en algunos casos, lo que ha llevado a revisar la previsión de caída de las ventas entre un 5 y un 7% para 2023. Entre los factores se encuentran la inflación y los prolongados debates sobre calefacción, que provocan incertidumbre entre los consumidores. Para contrarrestarlo, los responsables políticos tratan de estimular el gasto y la construcción.
Los primeros datos para 2023 indican una disminución de los pedidos de muebles para el hogar en Alemania en torno al 12%, con un descenso de los tapizados del 10% y de los muebles de cocina del 2%. El trabajo a jornada reducida aumenta como estrategia para hacer frente a esta situación. Los problemas de suministro han mejorado, pero los precios de los materiales siguen siendo altos, mientras que los costes de embalaje y logística aumentan.
De enero a junio de 2023, unos 430 fabricantes alemanes de muebles con más de 50 empleados experimentaron un ligero descenso de las ventas del 0,2%. Sin embargo, esta cifra no refleja totalmente la situación del mercado debido a diversos factores. Las ventas nacionales cayeron un 1,2%, mientras que las extranjeras experimentaron un modesto repunte del 2%.
Dentro de los segmentos, las ventas de muebles de cocina crecieron un 6,7%, pero esta cifra está influida por ciertos factores. Las ventas de muebles tapizados bajaron un 0,1%, las de otros muebles y piezas disminuyeron un 9,6%, y el sector de los colchones sufrió una importante caída del 19,3%. Los segmentos de bienes de equipo, como el mobiliario de oficina y el mobiliario comercial, obtuvieron mejores resultados que los bienes de consumo.
