ALEMANIA - La industria alemana de muebles de cocina sigue beneficiándose de la modernización del hogar en tiempos de coronavirus.

Según las estadísticas oficiales, los fabricantes alemanes de muebles de cocina aumentaron sus ventas en un 13 por ciento hasta alcanzar EUR 2.100 millones en los cuatro primeros meses de este año. Las exportaciones aumentaron un 13,4%, y el mercado nacional un 12,6%.

"A pesar de las difíciles condiciones generales, la demanda de cocinas planificadas individualmente sigue siendo buena", informó Frank Jüttner, portavoz de la junta directiva de AMK (asociación de comercio y servicios de la industria alemana del mueble de cocina).

En sus perspectivas para la segunda mitad del año, el director general de AMK, Markus Sander, llamó la atención sobre las oportunidades, pero también sobre los importantes riesgos. La importancia de las cocinas seguirá siendo alta, y la construcción residencial se está estabilizando en un nivel alto. Sin embargo, la guerra de Ucrania y la inflación provocan incertidumbre entre los consumidores.

Además, el enorme aumento de los costes de las materias primas y del transporte supuso un gran reto para la industria y el comercio. A ello se sumó el atasco de contenedores frente a los puertos chinos. Las interrupciones resultantes en las cadenas de suministro se convirtieron en una gran carga, también más allá del año en curso. "La interconexión mundial en la producción de módulos de chips conducirá a un suministro persistentemente ajustado de chips", dijo Sander.