ALEMANIA - Se estima que las ventas de la industria alemana del mueble disminuirán un 4,3 por ciento en 2023, alcanzando aproximadamente EUR 18.000 millones, según datos oficiales.

Este descenso afectó tanto a las ventas nacionales, que cayeron un 4,6 por ciento, como al negocio exterior, que experimentó un retroceso del 3,6 por ciento. La tasa de exportación se situó en el 33,4%. Jan Kurth, director general de las asociaciones alemanas de la industria del mueble, atribuye este descenso a factores como la indecisión de los consumidores, impulsada por la inflación, el retroceso del sector de la construcción y las incertidumbres geopolíticas.

Mientras que en la primera mitad del año las ventas disminuyeron un 0,2%, debido a diversos factores como la cartera de pedidos y la dinámica de precios, en la segunda mitad se produjo un fuerte descenso del 8,4%. Kurth señala que la entrada de pedidos recogida por la asociación a lo largo de 2023 fue, de media, en torno a un 11% inferior a la del año anterior, lo que refleja el debilitamiento del mercado. En particular, el segmento de "otros muebles", que engloba muebles de salón, comedor y dormitorio, experimentó las pérdidas más significativas, con un desplome de las ventas del 12,6 por ciento hasta los EUR 5.600 millones en comparación con el año anterior.

En diciembre de 2023, los fabricantes alemanes de muebles registraron una caída de las ventas del 9,4% en comparación con el año anterior, con un total de EUR 1.250 millones. A pesar de un ligero repunte en muebles de oficina y otros muebles institucionales, todos los demás sectores experimentaron descensos. De cara al futuro, Kurth se muestra cautelosamente optimista en medio de los retos que plantea el entorno del mercado, destacando la preocupación por la debilidad de la construcción residencial y pidiendo apoyo político. Sin embargo, encuentra cierto consuelo en el descenso previsto de la inflación y en los recortes de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo en la segunda mitad del año.