CHILE - El 8 de septiembre se completaron cuatro días de conversaciones entre constructores de viviendas de Estados Unidos con funcionarios del gobierno de Chile, agremiaciones e industriales orientadas hacia el aumento de las exportaciones de madera blanda y otros productos de madera hacia Norte América.
"Las reuniones con más de 100 empresas chilenas productoras de madera, organizaciones profesionales y funcionarios del gobierno fueron extremadamente productivas", dijo Jerry Howard, director general de la Asociación Nacional de Constructores de Viviendas (NAHB) de EE.UU. "Somos partidarios de la apertura de la competencia en el mercado de la madera EE.UU. porque sabemos que va a beneficiar a las familias estadounidenses que quieren comprar casas y a los constructores estadounidenses que buscan un suministro constante de madera a precio asequible".
Las conversaciones cubrieron varias áreas, incluyendo el establecimiento de contactos entre los productores chilenos y los compradores estadounidenses e identificar y hacer frente a las barreras políticas para aumentar el volumen de las exportaciones chilenas de su nivel actual.
NAHB se puso en contacto con dos de los tres mayores productores de madera chilena y una serie de otros productores más pequeños quienes se comprometieron a trabajar junto con su gobierno para ayudar a aumentar las exportaciones. Además, la NAHB tuvo la oportunidad en Chile de reunirse con un productor de madera de Suecia, que expresó interés en las conversaciones sobre el aumento de las exportaciones de madera a los EE.UU. y la construcción de una relación más fuerte a futuro.
Aunque Chile tiene actualmente apenas 1.22 por ciento del mercado de la madera EE.UU., la NAHB ve un gran potencial de crecimiento debido a que las dos naciones tienen un acuerdo de libre comercio.
"A medida que la recuperación de la vivienda en EE.UU. continúa recuperando ritmo, la demanda de madera para la construcción crecerá", dijo Howard. "Esta es la razón por cual la expansión del comercio de madera con Chile puede beneficiar a ambas naciones. Chile tendría la oportunidad de aumentar sus exportaciones y cuota de mercado a los Estados Unidos, mientras que las industrias de EE.UU., tales como la construcción que dependen de un suministro fiable de la madera blanda, serían capaces de satisfacer las necesidades de vivienda de los consumidores estadounidenses y mantener la madera de construcción y la vivienda asequible".
